viernes, 3 de abril de 2009

Calada Costa da Morte

Fin de semana, escapada con el compañero de pesca, se durmió en Carballo, y por la mañana temprano a patear la costa buscando un sitio donde echar unas varadas. Después de muchas vueltas, se encontró una zona que podía servir. La mar entraba bien, ý el sitio tenía buena pinta.








Lanzando por largo, a la punta de la izquierda, es donde se sintió más pescado.















Zona derecha de la calada, con muchas piedras rebosantes de percebes y mucho aliciente para que entrara el pescado.









Enrique, caña en mano, esperando la ansiada picada....




Así quedó la mar. Todo lo que se presagiaba tan bién, al principio de la marea, se fué al traste ya que se quedó la mar a medida que iba subiendo y, las picadas se dejaron de sentir.










Ahi está el resultado de la jornada. Podían haber sido más, pero entre que se escapó alguna furagaña de porte y que la mar se nos fué quedando...